En la ciudad de las diagonales, el calendario marca que es sábado, pero el reloj biológico de los platenses ya vive en el lunes. No se habla de otra cosa. En cada rincón de La Plata, la agenda productiva ha tenido que hacerle un lugar obligado a la pasión, y las pymes no son la excepción.
Desde los talleres de Los Hornos hasta las oficinas del centro, esta semana el ruido de las máquinas y los teclados se mezcló inevitablemente con las «chicanas» de pasillo. El café de media mañana dejó de ser una pausa para hablar de economía o política y se transformó en la trinchera donde se juegan las apuestas, se miden las ansiedades y se reaviva esa rivalidad que divide a la ciudad en dos colores. Porque en La Plata, cuando se acerca el clásico, hasta el balance de fin de año pasa a un segundo plano.
Para entender cómo se vive esta previa, dialogamos con dos protagonistas que, aunque comparten la realidad de emprender en la región, este lunes estarán en veredas opuestas. Por un lado, Francisco Gliemmo, referente del sector productivo, presidente del Consejo Consultivo y ex presidente de Gimnasia y Esgrima, y por otro, Natalia Timossi, RR.HH. en Inoxpla Ingenieria, prosecretaria de la Unión Industrial del Gran La Plata y socia de Estudiantes.
Gliemmo: Esta permitida la chicana «pero prohibidos los excesos»
Al ser consultado por qué es hincha del Lobo, Francisco Gliemmo indicó: «Llegué al País a los 6 años, no conocía quién era quién, a los 7 me invitaron los chicos del barrio para ver un clásico, perdió Gimnasia con muchas «cargadas» a ellos, decidí respaldarlos y ahí comenzó mi sentimiento por el Lobo».

Francisco Gliemmo, ex presidente del Lobo en 2004
-Usted tuvo empresa hasta hace poco. ¿Cómo se vive la rivalidad puertas adentro con los empleados? ¿Está permitida la chicana o hay un código de silencio para evitar conflictos?
FG: -Norma sagrada, todo permitido pero prohibido los excesos
¿Tenía alguna rutina o cábala en el negocio antes de un partido importante?
FG: -Ninguna, siempre con el convencimiento que podemos ganar.
Timossi: Hay cargadas «pero con respeto»
«Soy hincha desde la cuna por mi familia: mi abuelo, mi padre, mi hermano y ahora mi hijo. Recuerdo los domingos todos juntos mirando un partido. Y es cómo que eso lo llevas en la sangre. Me emociona», afirma Natalia Timossi, reconocida Pincharrata.

Natalia con su padre, Hugo, referente industrial e hincha de Estudiantes.
-¿Cómo se vive la rivalidad en la empresa?
-Cómo son empleados con mucha antigüedad ya se conocen tanto que no hay chicanas. A veces se cargan Pero con respeto, solo risas.
-¿Tenés alguna cábala?
– Cábalas hay… Pero no se dicen (ríe).
-Si tu equipo pierde la semifinal, ¿con qué cara vas el martes? ¿Afecta tu paciencia y toma de decisiones? Y si gana… ¿hay ‘premio’ o desayuno para el equipo?»
-La cara no muy buena Pero metiéndole onda. No, no afecta mi paciencia ni mis decisiones. ¡Y si gana hay una alegría inmensa, con gran sonrisa!
Más allá de los cargos, los roles jerárquicos y las responsabilidades, este lunes La Plata volverá a demostrar que su verdadero motor es la pasión. Cuando la pelota empiece a rodar, las diferencias se reducirán a 90 minutos de ilusión y nerviosismo. Y aunque el martes las persianas se levanten como siempre y la rueda productiva siga girando, el aire en las oficinas y talleres tendrá, inevitablemente, el peso específico del resultado. Porque en la ciudad de las diagonales, el fútbol no es solo un deporte: es el estado de ánimo con el que se encara la semana… y el fin año.







