CÓRDOBA – Renault Argentina confirmó una noticia que marca un punto de inflexión para la industria automotriz nacional: a partir de este mes de diciembre de 2025, la histórica Fábrica Santa Isabel dejará de producir los modelos Sandero, Logan y Stepway.
Estos vehículos, que comenzaron a fabricarse en la zona sur de la capital cordobesa en 2016, cerrarán un ciclo de casi una década en la que se convirtieron en referentes del mercado local y regional, acumulando cerca de 160 mil unidades fabricadas.
En un comunicado oficial difundido en las últimas horas, la marca del rombo explicó que la decisión responde a una «evolución estratégica del portafolio regional y de la preparación para una nueva etapa industrial de productos y tecnologías fabricadas en su planta Santa Isabel». De esta manera, se oficializa el «fin de vida industrial y comercial» de estos modelos para dar paso a nuevos proyectos.
Una transición hacia las pick-ups
El cese de producción de estos compactos no implica el vacío total en las líneas de montaje, sino un cambio de perfil productivo. Según trascendió, la estrategia de la firma francesa apunta ahora todos sus cañones al proyecto Concept Niágara. Se trata de la nueva pick-up compacta que fue anunciada en septiembre de 2024 y cuya producción en serie está prevista para comenzar en el segundo semestre de 2026.
Mientras se acondiciona la planta para este nuevo desafío, el único modelo que mantendrá su ritmo habitual de fabricación será el exitoso furgón Kangoo. Este utilitario continúa liderando holgadamente su segmento en el mercado argentino y, durante este año, reactivó su exportación al mercado brasileño, consolidándose como el pilar fundamental de la planta en esta etapa de transición.
El contexto industrial y la incertidumbre laboral
La noticia se conoce en un contexto delicado para el complejo industrial de Santa Isabel. Apenas el mes pasado, en octubre de 2025, la firma japonesa Nissan había anunciado el cese de sus operaciones en la misma planta que compartía con Renault, lo que ya había encendido las alarmas en el sector.
Si bien la reconversión hacia la nueva pick-up promete modernizar la planta, el «bache» productivo entre el fin de los modelos actuales (diciembre 2025) y el inicio del nuevo proyecto (segundo semestre 2026) genera preocupación. Hasta el momento, la empresa no ha informado cuál será el impacto de esta medida sobre la plantilla de trabajadores, desconociéndose si habrá despidos, suspensiones o reducciones en la jornada laboral para los operarios que, hasta hoy, se dedicaban al montaje del Sandero, el Logan y el Stepway.
